Ubicada en el interior de Valencia, la región de Utiel-Requena se alza entre los 600 y 900 metros sobre el nivel del mar. Esta altitud favorece la maduración pausada de la uva y realza su concentración aromática. La influencia del clima continental, con notables contrastes entre el día y la noche, ayuda a preservar la acidez natural y el equilibrio en los vinos. Estas condiciones geográficas privilegiadas han convertido a Utiel-Requena en una tierra vitivinícola de tradición milenaria.